A veces es cuestión de escuchar o leer las palabras justas para visualizar lo que uno busca.Hasta la persona que tira de la soga hasta la última instancia, desafiando todos los límites, busca en su vida esa armonía que se ajuste a su ritmo. Y es que si cerramos los ojos y escuchamos la dirección, nos damos cuenta que, por más empeñados que estemos en aferrar las manos a esa soga y seguir tirando, nos aplasta nuevamente esta palabra: armonía.
Quién se anima a desafiar su equilibrio? Cuántas veces nos dijimos, seguros de estar tomando la mejor decisión "quiero mirar para adentro mío, pero no es el momento, no puedo ser vulnerable en este momento"? Hay algún momento propicio para ser vulnerable? Es lógico esperar y esperar para mirar para adentro?
Auto-debatiendo esto más veces que menos en este último tiempo, sigo acá con mucho miedo de interiorizarme en mi misma. Es que no es esta la forma más clara de desafiar nuestro complicado pero supuestamente agradable equilibrio? No cabe duda de que estamos convencidos de que hacemos todo lo que está a nuestro alcance para mantenernos sobre la soga, dando paso por paso, a veces salto por salto...sin embargo si vuelvo a cerrar los ojos y vuelvo a escuchar la dirección, me dice que el equilibrio está en no esforzarse en no ser expulsado por la soga.
Muchas veces callo por simple convicción de no hablar si no tengo nada que decir. Es así como, en vez de usar la palabra en el momento adecuado, peco de reservada. Mi desafío próximo es dejar salir lo que hace ruido adentro mío y solo yo escucho. Vaya contradicción! Es que estoy esforzándome por no decir lo que podría? A ver...
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